Costumbres Ancestrales: Explorando la Cultura de los Chontales de México y Tabasco

El término “chontal”, derivado del náhuatl “chontalli” que significa “extranjero”, encierra una historia rica y compleja de un pueblo indígena con raíces profundas en México. A lo largo de los siglos, los chontales han preservado sus costumbres únicas, adaptándose y resistiendo cambios para mantener viva su identidad cultural. Este artículo se adentra en la exploración de las tradiciones, creencias, organización social y economía de los chontales, tanto en la región de Oaxaca como en Tabasco, revelando la diversidad y la resiliencia de este valioso patrimonio cultural mexicano. Buscaremos entender su cosmovisión, su relación con la naturaleza y los desafíos que enfrentan para preservar su legado en el mundo moderno.
La historia de los chontales está marcada por conflictos, migraciones y un profundo vínculo con la tierra. Desde sus luchas contra grupos vecinos como los mixes y los zapotecos, hasta su participación en la guerra de Independencia de México, los chontales han demostrado una firme determinación para defender sus territorios y su manera de vida. Su denominación auto-referencial, “Slijuala xanuc”, que significa “habitante de las montañas”, refleja su conexión intrínseca con el paisaje accidentado de la Sierra Madre del Sur y la planicie costera, el hogar ancestral donde se han asentado durante generaciones.
A través de este viaje cultural, exploraremos cómo las costumbres de los chontales se manifiestan en sus prácticas agrícolas, sus expresiones artísticas, sus rituales religiosos y su compleja organización social. Analizaremos la importancia de la lengua chontal, tanto en Oaxaca como en Tabasco, y los esfuerzos que se están llevando a cabo para revitalizarla y asegurar su transmisión a las futuras generaciones. Aprenderemos sobre el significado de sus festividades, su gastronomía tradicional y su profundo respeto por el equilibrio natural.
Orígenes y Lengua
Las raíces de los chontales son objeto de debate entre los estudiosos, pero se cree que están relacionados con grupos californianos y que su idioma, en la región de Oaxaca, pertenece a las lenguas hokanas, una familia lingüística distinta que se encuentra en áreas geográficas muy dispersas. La diversidad lingüística de los chontales se manifiesta en la existencia de dos ramas principales: el chontal de Oaxaca, perteneciente al tronco hokano, y el chontal de Tabasco, que forma parte del tronco maya. Esta diferencia lingüística refleja las diversas trayectorias históricas y las influencias culturales que han moldeado la identidad de cada grupo. La preservación de estas lenguas es crucial para mantener viva la memoria colectiva y la cosmovisión única de los chontales.
El origen del nombre "chontal" es una prueba de la influencia náhuatl en la región. Sin embargo, la auto-denominación "yoko yinikob" o "yoko winikjo'" que utilizan los chontales de Tabasco apunta a una identidad precolombina mucho más antigua. Se cree que los putunes, un grupo maya que llegó al oriente de la Península de Yucatán en el siglo IV, se asentaron en Tabasco y jugaron un papel fundamental en la formación de la cultura chontal. Los chontales fueron grandes navegantes y comerciantes, extendiéndose por gran parte de Mesoamérica, lo que evidencia su importancia histórica y su capacidad de adaptación a diferentes entornos.
La lengua chontal, en cualquiera de sus variantes, es un componente esencial de la identidad cultural de este pueblo. En Tabasco, el idioma Yoko t’aan, pertenece a la familia maya y aunque el número de hablantes ha disminuido, se están realizando esfuerzos significativos para su revitalización. Palabras como «Jats’uts» (Bonito/a), «Máats’» (Gracias) y «K’iimil» (Comida) son ejemplos de la riqueza lingüística chontal y su capacidad para expresar valores y conceptos propios de su cultura. Los programas de educación bilingüe y las iniciativas comunitarias son fundamentales para garantizar que las futuras generaciones puedan conectarse con sus raíces a través de la lengua ancestral.
Territorio y Organización

El territorio chontal se extiende a lo largo de la Sierra Madre del Sur y la planicie costera sudaccidental de Oaxaca, abarcando municipios como San Carlos Yautepec, Santa María Ecatepec y Asunción Tlacolulita. En Tabasco, los chontales habitan principalmente en municipios como Centro, Nacajuca, Centla, Macuspana, Jonuta y Jalpa de Méndez. La geografía variada de estos territorios influye directamente en las actividades económicas y las costumbres de los chontales. Desde las montañas cubiertas de bosques hasta las tierras bajas fértiles, el paisaje proporciona recursos diversos que sustentan la vida de las comunidades chontales.
La organización social de los chontales se basa tradicionalmente en la familia extensa patrilineal y el tequio, una forma de trabajo colectivo que permite a las comunidades llevar a cabo proyectos de beneficio común. El tequio fortalece los lazos comunitarios y promueve la cooperación entre los miembros del grupo. La organización social también se caracteriza por la existencia de autoridades tradicionales, como los ancianos y los líderes espirituales, quienes desempeñan un papel fundamental en la toma de decisiones y la resolución de conflictos. La estructura social chontal refleja un profundo respeto por la autoridad, la tradición y el bienestar colectivo.
La infraestructura básica en el territorio chontal ha mejorado en las últimas décadas, con acceso a redes de agua entubada, electricidad, telefonía rural y correo. Sin embargo, persisten desafíos en materia de acceso a servicios de salud, educación de calidad y oportunidades económicas. La migración en busca de trabajo, especialmente a Petalcatepec y Mecaltepec durante la cosecha de café, es una realidad común en muchas comunidades chontales, lo que evidencia la necesidad de impulsar el desarrollo económico local y crear empleos sostenibles. La autosuficiencia alimentaria y la gestión responsable de los recursos naturales son pilares fundamentales para el futuro de las comunidades chontales.
Creencias y Cosmovisión
La cosmovisión chontal está profundamente arraigada en la naturaleza y en la creencia en un mundo habitado por espíritus y fuerzas sobrenaturales. La concepción de la enfermedad se basa en los opuestos frío-caliente, lo que influye en las prácticas de curación tradicionales. Los chontales utilizan una amplia variedad de plantas medicinales, alrededor de 356 especies diferentes, para tratar diversas dolencias. Este conocimiento ancestral sobre las propiedades curativas de las plantas se transmite de generación en generación y representa un valioso legado cultural. La naturaleza es vista como una fuente de vida, sabiduría y poder, y se le debe respeto y reverencia.
La cosmogonía chontal describe la creación del mundo a través de mitos y deidades. Las historias sobre los orígenes del universo, la humanidad y los animales son transmitidas oralmente y forman parte integral de la identidad cultural chontal. Estas narraciones no solo explican el mundo que nos rodea, sino que también ofrecen lecciones morales y enseñanzas sobre cómo vivir en armonía con la naturaleza y con los demás. La veneración a los antepasados y la creencia en la continuidad de la vida después de la muerte son elementos centrales de la cosmovisión chontal.
La religión chontal combina elementos indígenas y católicos, resultado del proceso de evangelización durante la Colonia. En sus rituales y festividades, se pueden observar sincretismos religiosos, donde las creencias ancestrales se fusionan con las prácticas católicas. El culto a los dioses Coh, Yum pa’, Yum tee y Yum chab, ancestral a la cultura, convive con la devoción a santos y vírgenes católicas. Esta combinación de elementos religiosos refleja la capacidad de los chontales para adaptarse y reinventar sus tradiciones sin perder su esencia cultural. La fe y la espiritualidad son componentes esenciales de la vida cotidiana de los chontales.
Tradiciones y Festividades
Las tradiciones chontales son un reflejo de su historia, sus creencias y su relación con el entorno natural. La elaboración de utensilios de cocina, tejidos de palma y artesanías de madera y textiles son ejemplos de la maestría artesanal de los chontales. Estas actividades no solo son una fuente de ingresos, sino también una forma de expresar la creatividad y la identidad cultural. La vestimenta tradicional, con huipiles bordados para las mujeres y camisas de manta y pantalones de algodón para los hombres, es un símbolo de orgullo y pertenencia.
Las festividades chontales combinan elementos indígenas y católicos, creando celebraciones únicas y coloridas. El día de muertos es una festividad especialmente importante, donde se honra a los antepasados y se les ofrece comida, bebida y flores. Las danzas tradicionales, acompañadas de música y cantos, son una expresión vibrante de la cultura chontal. Estas festividades no solo son momentos de alegría y celebración, sino también oportunidades para fortalecer los lazos comunitarios y transmitir las tradiciones a las futuras generaciones.
Los rituales agrícolas juegan un papel fundamental en la vida de los chontales, ya que dependen de la tierra para su subsistencia. Ceremonias para pedir buenas cosechas, agradecer por los frutos obtenidos y proteger los cultivos de las plagas son parte integral de su cosmovisión. Estos rituales demuestran el profundo respeto que los chontales tienen por la naturaleza y su comprensión de los ciclos agrícolas. La tradicional gastronomía chontal, con platillos como el puchero tabasqueño, tamales de masa colada y pejelagarto asado, es también una expresión de la cultura y la identidad chontal.
Economía y Artesanía

La economía de los chontales se basa tradicionalmente en la agricultura, la pesca y la producción artesanal. El cultivo de la cochinilla impulsó la prosperidad chontal a finales del siglo XVI, pero luego fue prohibido para los zapotecos, lo que generó un impacto negativo en su economía. La agricultura de temporal, con cultivos como maíz, cacao, plátano y otros productos locales, sigue siendo una actividad fundamental para la subsistencia de muchas comunidades chontales. La ganadería, con especies menores y mayores, también juega un papel importante en la economía local.
La producción artesanal es una fuente de ingresos importante para muchas familias chontales. La elaboración de tejidos de palma, artesanías de madera, cerámica y textiles son ejemplos de la creatividad y la habilidad de los artesanos chontales. Estos productos no solo son apreciados localmente, sino que también se comercializan en mercados regionales y nacionales. El desarrollo de iniciativas de turismo comunitario y la comercialización de artesanías son estrategias importantes para impulsar el desarrollo económico local y generar empleos sostenibles.
La zona arqueológica de Malpasito en Tabasco es un lugar notable que vale la pena visitar, ya que revela la riqueza histórica y cultural de la civilización chontal. La preservación de este patrimonio arqueológico es fundamental para comprender el pasado y valorar la identidad cultural de los chontales. La promoción del turismo responsable y la inversión en la infraestructura turística pueden generar beneficios económicos para las comunidades chontales y fomentar el intercambio cultural. La valorización de la cultura chontal es un paso importante para fortalecer su identidad y garantizar su futuro.
Chontales de Tabasco
Los chontales de Tabasco son un pueblo indígena con profundas raíces históricas y culturales, descendientes de los antiguos mayas y con una identidad que ha resistido la colonización. Su lengua, tradiciones y conexión con la naturaleza son elementos clave de su identidad. Se autonombran “yoko yinikob” o “yoko winikjo’”, lo que significa "gente verdadera" o "gente del corazón", expresando su profundo sentido de pertenencia y su conexión ancestral con la tierra. Habitando los municipios de Centro, Nacajuca, Centla, Macuspana, Jonuta y Jalpa de Méndez, su presencia ha marcado la historia y la cultura de Tabasco.
La historia de los chontales de Tabasco está ligada a la de los putunes, quien llegaron al oriente de la Península de Yucatán en el siglo IV y se asentaron en la región. Los chontales fueron grandes navegantes y comerciantes, extendiéndose por gran parte de Mesoamérica, demostrando una notable capacidad de adaptación a diversos entornos. El cacicazgo de Chocohtán, formado por los chocoh, descendientes del puma, fue un importante centro de poder en la región, y la influencia chontal se extendió a otras regiones de la Península de Yucatán y Guatemala.
El legado cultural de los chontales de Tabasco se manifiesta en su rica gastronomía, sus festividades tradicionales y su lengua Yoko t’aan, una lengua maya distinta que, aunque ha disminuido su número de hablantes, se están realizando esfuerzos para su revitalización. El pozol de cacao y el chorote son bebidas tradicionales que forman parte integral de su cultura, mientras que el puchero tabasqueño y los tamales de masa colada son platillos emblemáticos que reflejan su conexión con los ingredientes locales. La preservación de sus costumbres y la valorización de su patrimonio cultural son fundamentales para garantizar el futuro de este pueblo indígena.
La cultura de los chontales, tanto en Oaxaca como en Tabasco, es un tesoro invaluable del patrimonio cultural mexicano. Sus costumbres, su lengua, sus creencias y su organización social son un testimonio de su historia, su resiliencia y su profundo respeto por la naturaleza. A pesar de los desafíos que enfrentan, los chontales han logrado preservar su identidad cultural y continuar transmitiendo sus tradiciones a las futuras generaciones.
Es fundamental apoyar los esfuerzos que se están llevando a cabo para revitalizar la lengua chontal, promover el desarrollo económico sostenible y proteger su patrimonio cultural. El turismo comunitario, la comercialización de artesanías y la inversión en educación y salud son estrategias importantes para mejorar la calidad de vida de las comunidades chontales y fortalecer su autonomía. La implementación de políticas públicas inclusivas y el reconocimiento de sus derechos indígenas son esenciales para garantizar su bienestar y su participación plena en la sociedad mexicana.
En definitiva, la exploración de las costumbres de los chontales nos permite apreciar la diversidad cultural de México y comprender la importancia de preservar las identidades ancestrales. Su historia, su cosmovisión y su legado cultural son una fuente de inspiración y un recordatorio de la riqueza que reside en la diversidad humana. Al valorar y apoyar a los chontales, contribuimos a construir un futuro más justo, equitativo y sostenible para todos.
Deja una respuesta